viernes, 7 de enero de 2011

Baile Flamenco


Hasta mediados del siglo XX, los intelectuales asociaban este tipo de baile como "algo denigrante y costumbre propia de gente de mal vivir", pensamiento propio de un movimiento "antiflamenco" de la generación del 98'.

De todas maneras me causa mucha curiosidad entender la conformación de este estilo musical que une (en el sur de España) mundos tan distintos (oriente + occidente), tanto en su forma: modo de vida, construcciones, dialectos... así como también su fondo: números, astronomía, filosofía de vida, moral (los árabes siguieron cultivando lo comenzado por pensadores griegos, mientras que en occidente Roma y su "pan y circo" dejaron muchas lagunas respecto a ese tema. Esto sin contar con el obscurantismo respaldado por la iglesia católica en la época medieval)

Se agradece a García Lorca y Manuel de Falla, por defender a esta neocultura (se me imagina como los inicios del mundo globalizado), la cual une a los polos del mundo conocido- en esos años- y su trabajo para valorar y estudiar este baile tan lleno de ritos, pasión, culturas, ritmos y por sobretodo entrega de lo que se siente.

Dato: leí (les debo la fuente) que en los cantos moros, se oye por primera vez en occidente, la idea de la mujer amada (la cual muchas veces no es intachable moralmente) como un ser vanagloriado que se pone como inalcanzable para su enamorado, por la cual el amante entrega pensamiento, deseos, cordura y hasta la vida.
Esta concepción se contrapone al heredado por la cultura latina, la cual nos habla de la mujer como un ser angelical que se guarda para el matrimonio y destaca por su entrega fiel e incondicional a su esposo. Interesante! (les debo si o sí una entrada con este tema)

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